Cuando en enero de este año empezamos a barajar cuál sería nuestro viaje del verano había dos lugares que nos interesaban especialmente: Escocia e Islandia. Enseguida nos ilusionamos con la posibilidad de visitar ambos destinos aprovechando la cercanía en que se encuentran el uno del otro. Así que nos pusimos manos a la obra y empezamos los preparativos para poner en marcha el viaje que nos llevaría, en su primera etapa, a recorrer durante 14 días las Tierras Altas de Escocia.
Con la entrada de hoy iniciamos la serie de relatos del viaje a Escocia
que los Janonautas hicimos durante el pasado mes de agosto.
Un poquito de Escocia (según Wikipedia)
Escocia es la más septentrional de las cuatro naciones que forman el Reino Unido, junto con Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte. El territorio escocés abarca 78.772 km2, y su población se estima en 5.116.900 habitantes. La capital es
Edimburgo, mientras que
Glasgow es la ciudad más grande.
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La bandera escocesa |
El
Reino de Escocia fue un estado independiente hasta 1707, fecha en la se firmó el Acta de Unión con Inglaterra para crear el Reino de Gran Bretaña. La unión no supuso alteración del sistema legal propio de
Escocia, que desde entonces ha sido distinto del de los otros miembros. Es considerada en el derecho internacional como una entidad jurídica distinta. La pervivencia de unas leyes propias, y de un sistema educativo y religioso diferenciado forman parte de la cultura escocesa y de su desarrollo a lo largo de los siglos.
Aunque el Reino Unido pertenece a la Unión Europea no utilizan el euro como moneda. Siguen manteniendo la libra esterlina. En
Escocia también se utiliza la libra escocesa, que tiene el mismo valor que la esterlina, pero sólo puede utilizarse en este territorio.
Preparativos del viaje
En el mes de febrero empezamos a preparar el viaje. Puede parecer extraño pero el recorrido lo planteamos a partir de una experiencia que queríamos realizar: el viaje en el tren de vapor que sale en las películas de Harry Potter, el
Jacobite Steam Train. Habíamos leído que se tenía que reservar con mucha antelación y en el mes de febrero miramos los días en los que había billetes y una vez reservados preparamos el itinerario.
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El tren de Harry Potter, Jacobite Steam Train |
Hace unos años, los
Janonautas (Àlex y Trini, Clàudia no había nacido todavía) hicimos un recorrido en coche por
Escocia de 7 días y nos habíamos quedado con las ganas de recorrer la parte más septentrional de las Highlands. El objetivo en este viaje era recorrer la costa norte en un itinerario circular con salida y llegada en
Edimburgo.
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Detalle en un calle de las Highlands |
Los vuelos
El vuelo de ida lo hicimos con Ryanair saliendo desde Barcelona con destino
Glasgow. Inicialmente pensamos que el mejor trayecto era Barcelona-Edimburgo pero, al comparar precios y horarios, vimos que nos salía más a cuenta volar desde Barcelona a
Glasgow y hacer en tren el trayecto desde esta ciudad hasta
Edimburgo. Desde el aeropuerto de
Glasgow parten trenes con mucha frecuencia hacia la estación central de la ciudad y una vez allí se debe cambiar de tren para, en menos de una hora, llegar a
Edimburgo.
La segunda etapa del viaje nos llevaba a Islandia desde
Edimburgo y la reserva del vuelo la hicimos con Easyjet.
Alquiler de coche
Otra cosa que teníamos clara era que los recorridos y las visitas las realizaríamos por nuestra cuenta y que para ello íbamos a alquilar un coche. Es la forma de viajar que más nos gusta a los
Janonautas por la autonomía y libertad que nos da. Hay que recordar que se conduce por la izquierda pero no nos costó nada adaptarnos.
Recorrer
Escocia en coche es muy cómodo. No hay grandes autopistas pero la mayoría de carreteras están en buen estado. Tan sólo en el norte nos encontramos con vías de un solo carril, poco transitadas, en las que se pueden utilizar los
passing places para adelantar o ceder el paso.
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Carretera en las Highlands |
El alquiler lo tramitamos desde aquí a través de la empresa Europcar. Los primeros días en
Edimburgo no nos hacía falta el coche por lo que hicimos la reserva a partir del tercer día que era cuando empezábamos la ruta pero, debido a los horarios de la oficina de alquiler, tuvimos que recoger el coche un día antes. Si no lo hacíamos así íbamos a perder mucho tiempo del primer día de ruta.
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Nuestro coche en Escocia |
Alojamiento y comidas
En el tema de alojamientos combinamos hoteles con Bed & Breakfast y hasta con un castillo (podéis ver la entrada
aquí). En general todos han estado bien y han cumplido con nuestras expectativas.
Excepto en el primer hotel en
Edimburgo, en todos los sitios en que pernoctamos el desayuno estaba incluido en
el precio del alojamiento. Normalmente podíamos elegir entre desayuno
continental o escocés. Este último era una verdadera bomba que nos servía para empezar el día con energía.
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Típico desayuno escocés |
Al mediodía tomábamos el
meal deal. Consiste en un sándwich o primer plato preparado, una bebida y un snack a elegir. Se vende en las grandes cadenas de supermercados que se pueden encontrar en cualquiera de las ciudades o pueblos importantes, incluso en algunas gasolineras. El precio es de 3 libras el pack.
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Tomando nuestro meal deal junto al Lago Ness |
Las cenas las hacíamos tanto en restaurantes como en
pubs. En estos últimos había que tener en cuenta que eran bastante restrictivos con respecto a dejar entrar niños a partir de las 20 horas.
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Momento Happy Beer cenando en Aberdeen |
Nuestro recorrido